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Sobre nosotros

A comienzos del siglo XIX, en el año 1818, vivía en Nápoles un joven curtidor llamado Vittorio Valmio. Su taller se encontraba en un estrecho callejón cerca del puerto. Desde el principio se distinguió por una atención extraordinaria al detalle y por el deseo de crear no solo productos, sino verdaderos “artefactos del tiempo”. Su trabajo se difundió rápidamente por el vecindario, pero el punto de inflexión llegó cuando Carolina Bonaparte —la hermana menor de Napoleón y antigua reina de Nápoles— oyó hablar de él. Aunque su poder ya pertenecía al pasado, su influencia y su gusto refinado permanecían.

La Nápoles histórica y el primer taller de Vittorio Valmio, 1818
“Artefactos del tiempo”: así describía la gente sus primeras piezas.

Al conocer al talentoso artesano, Carolina encargó toda una colección de bolsos de viaje y de mano de cuero —para ella, sus amigos y sus allegados—. Se dice que eligió personalmente los colores y las formas, y que Vittorio entregó el primer bolso en su residencia napolitana. Fue un momento de reconocimiento. A partir de entonces, las creaciones de Valmio comenzaron a aparecer en manos de aristócratas, eruditos, viajeros y diplomáticos. Cada pieza se hacía a mano, con respeto tanto por el material como por su futuro propietario.

Y exactamente así empezaría nuestra historia si quisiéramos contar un cuento romántico que vende. Pero la realidad es distinta… y por eso mismo más veraz y mucho más interesante.

Avancemos 200 años hacia el mundo real. Año 2018. Un joven ingeniero de diseño que vive en Karlovy Vary, Czech Republic se da cuenta de que necesita un bolso cómodo —y, sobre todo, con estilo— para sus viajes de trabajo. Revisa la oferta del mercado y no encuentra nada adecuado.

Karlovy Vary: el lugar donde nace la idea
Karlovy Vary, Czech Republic, 2018.

Sin mucha duda surge la idea: ¿por qué no mandarlo hacer? Exactamente como él lo quiere. Elegir el cuero, el forro, las herrajes, los mosquetones. Tras hablar con varios pequeños talleres especializados en cuero y aclarar todos los detalles, toma la decisión: diseñar un bolso que siente perfecto. Así, directamente en AutoCAD, junto a planos técnicos, se dibuja el modelo del primer bolso de viaje de cuero. Así nació la marca M.HELENS. Sin reinas, pero con una idea. Sin leyendas, pero con una historia real. El nombre se inspiró en el volcán Mount St. Helens —dormido pero poderoso—, en el estado de Washington (EE. UU.).

Primeros bocetos y prototipo en AutoCAD

Y quizá te preguntes: ¿por qué M.HELENS si estamos hablando de Valmio? Amigos, un poco de paciencia: la historia continúa.

Hay una regla general: cuando creas algo para ti —con calidad, practicidad y belleza— la gente lo nota enseguida. Amigos y colegas empezaron a preguntar dónde podían comprar un bolso así. ¿Había otros modelos?

Como puedes imaginar, la ingeniería fue quedando en segundo plano. El enfoque principal pasó a ser la producción y venta de artículos de cuero. Primero creamos una pequeña línea de bolsos para cubrir al máximo distintas necesidades: desde modelos urbanos compactos hasta piezas espaciosas para viajar. Y, por supuesto, decidimos vender en línea, para no limitarnos a un solo país y acercar nuestros productos a personas de todo el mundo. En el invierno de 2019 decidimos participar en la feria KABO de Brno.

El objetivo era conocer mejor el mercado y comprender con mayor claridad lo que realmente querían los clientes.

Stand en la feria KABO de Brno
En KABO tuvimos el stand más llamativo. Lo diseñamos y construimos nosotros mismos.

Por cierto, fue el stand más destacado de toda la exposición. Lo diseñamos nosotros, compramos la madera, barnices y pinturas, y montamos todo con nuestras propias manos en un garaje.

La empresa creció y evolucionó, y en la primavera de 2020 tomamos la decisión de hacer un rebranding. Así nació la empresa y marca Valmio que hoy conoces. Nuevo estilo, nuevo nombre, pero la misma filosofía.

Logotipo y estilo de Valmio tras el rebranding de 2020
Rebranding 2020: nuevo nombre, nuevo estilo.

Hoy, Valmio ha creado varias submarcas premium y vende con confianza sus productos en toda Europa.

Detalle del trabajo con cuero y herrajes en producción
Producción global: del cuero a los herrajes y los textiles.

Nuestros modelos se crean en distintos lugares del mundo. En uno adquirimos el cuero, en otro los herrajes, en otro los textiles. Todo se une en productos diseñados pensando en la funcionalidad y el estilo. Nuestros artículos se fabrican tanto en grandes fábricas como en pequeños talleres familiares, donde maestros con más de 20 años de oficio no solo cosen, sino que participan activamente en el proceso: ayudan con la construcción, comparten experiencia, aportan ideas y perfeccionan nuevos modelos. Seguimos de cerca las tendencias y ampliamos constantemente el surtido. Combinamos cuero natural con otros materiales —como nailon, lona o poliéster—, lo que nos da más libertad y flexibilidad para crear diseños interesantes, estilosos y prácticos para distintos usos y personas. Con este enfoque, procuramos destacar y no convertirnos en parte del mercado masivo sin rostro.

Colección Valmio: combinación de cuero y materiales técnicos
Carácter y utilidad ante todo.
Deliberadamente evitamos frases hechas como:
“con amor por el detalle” o “controlamos el curtido en cada fase”.
Suena bien, sí. Pero todo el mundo lo dice, y a menudo no hay nada detrás. Nosotros simplemente describimos las cosas como son. Sin grandilocuencias. Sin cuentos. Sin grandes promesas.

Si construyes una marca con nombre, la calidad debe darse por sentada y estar en primer lugar. No es motivo de alarde: es el fundamento.

La historia de Valmio no es un truco de marketing.
Es un viaje. Real. Vivo. Y en marcha.

Valmio hoy: ventas en toda Europa
Sin presupuestos de miles de millones. Con la constancia de un equipo pequeño.

El camino de una pequeña empresa que —sin presupuestos multimillonarios en marketing y publicidad— aspira a competir con marcas premium globales y a encontrar su lugar entre ellas.

Y, para terminar, una frase que repetimos a menudo: “El placer de la buena calidad dura más que el placer del precio bajo.”

Gracias por estar con nosotros. Puede que no seamos perfectos en todo, pero nos esforzamos por ser mejores cada día. El equipo de Valmio